domingo, 20 de marzo de 2011

Primeros días de colegio...

Al ser mis primeros días o semanas de colegio, no tengo mucho que decir, la verdad de las cosas es que pensé que comenzaría a ir al colegio pero mi apéndice quiso estar malo, y tuve que operarme de urgencia así que hablare de mis días en el hospital y mis días en mi casa como un bebé. Todo partió un lunes después de llegar del colegio sintiendo dolores estomacales y una "puntada" en mi lado derecho del estomago, fui de urgencia al servicio medico publico y debía esperar seis horas para mi atención , y pensé que quizás a esa hora mi apéndice estaría por "nacer", así que fui  a un servicio hospitalario privado, en el cual me inyectaron cuanta cosa pillaron, lo extraño fue que me dieron remedios, y a las cinco de la madrugada me dieron el alta medica pero el martes me devolví con todas mis cosas porque el dolor se trasladaba poco a poco a mi pierna... Entré a la clínica y casi estaba previsto, me vio el enfermero y me dijo "esto es para cirugía" así que en fin, entré a pabellón la operación duró no mas de cuarenta minutos, yo pensaba que duraba más, no me di ni cuenta cuando estaba en una sala acostada con muchos cables en mis brazos delgados y con mucho dolores en mi estomago, me miré y tenia tres parches, le pregunte a la enfermera con cara de asustada si me quedarían tres "tajos" en mi estomago y me dijo "no" y sonrió, me dijo que era para que no quedaran cicatrices. Me pasé toda esa noche sin poder dormir con fuertes dolores, me dolía todo mi cuerpo, y no quería comer nada.
En el día con lo único que me entretenía era con los censores de mi camilla, los cuales podía subir y bajar mi camilla a cada rato, podía estar mas cerca del techo y otras veces mas cerca del piso, algunas veces mas sentada y otras veces mas acostada. En mi pieza no tenia acompañantes, y al segundo día de hospitalizada llegó una señora, no revelaré su edad porque soy una señorita. Era una señora que no aguantaba sus dolores y el desmayo se había apoderado de su cuerpo. Con ella viví los temblores de esos día, en un día contamos 5 temblores de una intensidad de mas o menos 4 grados que corroboramos con la prensa televisiva. El día viernes por fin me pude ir a mi casa, llegue y he tenido bastantes visitas a las cuales valoro demasiado porque son personas que necesito en mi vida, el único problema es que me han traído cosas ricas para comer y tengo un régimen que solo me permite comer jaleas, tomar sopas... Pero dentro de todo el dolor está pasando y por eso mi blog es llamado "notengoapendice" porque no tengo, y siento que este apéndice ya nació después de 17 años, quien sabe si vivó y puede ir a la universidad como yo? podrá rendir la psu?, no lo creo, no lo creo...

4 comentarios:

  1. Que bueno poder saber algo tuyo Pía, estaba preocupado al saber de tu operación (me contaron que dijiste que el Doctor se parecía a mi). Gracias Señor que al parecer todo esta bien, y que sigas mejorando para que nos veamos pronto, cuidate mucho.

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  2. Después de todo creo que valió la pena tanto dolor y soy testigo de como jugabas con tu camilla. Parece que realmente estabas aburrida y tu máxima entretención fue esa.
    Ahora al fin estás en la casita y yo te puedo cuidar =)

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  3. Es excelente tu redacción Pía, yo ya sabía el tema de tu apéndice porque hablamos mediante inbox jaja. Espero que te mejores pronto porque en el curso estamos viendo del tema del polerón generación y no te puedes quedar afuera!. En todo caso le hemos pedido a la Vale que te vaya informando por el tema de los colores por si estás o no de acuerdo (todavia no hay nada muy definido) Te quiero mucho! Cuida es vació en ti donde solía haber un órgano llamado Apéndice, el mío te manda saludos jajajaja

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  4. Mi estimadísima Piyita:
    En realidad me carga escribir así; siento que no puedo expresar todos los equisdeses que llevo dentro, y esa mala costumbre es por culpa de facebook y msn. No importa, seguirán fluyendo todos aquellos íconos que tanto me llaman.
    Y bueno, mi cicatriz es más linda, porque yo tengo un tajito donde debería estar mi apéndice. Y como te dije hoy día, te envidio por haber pasado tantos día hospitalizada. Suertuda.
    Te quiero mucho, nos vemos.

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